
El pterigion es un crecimiento anormal de tejido fibroso de la conjuntiva o membrana que cubre la superficie externa del ojo, el cual tiende a dirigirse hacia el tejido de la córnea.
El principal factor de riesgo para desarrollar un pterigion es la exposición solar y la sequedad ambiental, de ahí la alta incidencia en países cercanos a la línea ecuatorial. Las personas que trabajan al aire libre son las más afectadas.
El pterigion se presenta como una zona elevada blanquecina en el borde de la córnea de forma triangular. Los síntomas dependen principalmente del tamaño de la lesión. Los más pequeños pueden ser asintomáticos, pero a medida que crecen pueden generar molestias en la superficie del ojo tales como:
- Ojo rojo
- Lagrimeo
- Sensación de cuerpo extraño
En casos muy severos la visión puede llegar a comprometerse al generarse astigmatismo. Pueden inclusive cubrir el área central de la córnea.
La mejor manera de prevenir el Pterigion es usar gafas de protección solar en periodos de exposición prolongada y el uso de colirios lubricantes para evitar la sequedad.
Tratamiento:
Las lesiones leves en general no requieren tratamiento y son manejados únicamente con chequeos periódicos y colirios lubricantes. Los casos más avanzados requieren extirpación quirúrgica.
Referencia: